
Irán vive momentos cruciales para su futuro coincidiendo con la firma, ahora hace un año, del pacto nuclear con Estados Unidos, por el que Irán frenó su carrera nuclear a cambio del embargo y levantamiento de sanciones. Desde que Washington y Teherán firmaron dicho pacto, delegaciones internacionales de alto nivel han viajado hasta el país asiático en busca de oportunidades de negocio.
Así pues, Irán busca socios internacionales a largo plazo que quieran invertir, producir y transferir tecnología al país para impulsar sus exportaciones más allá de los hidrocarburos. En este sentido, el régimen iraní tiene previsto invertir más de 350.000 millones de dólares en los próximos cinco años para desarrollar sus infraestructuras, rehacer su maltrecha industria, especialmente la petrolera, y convertir al país en una economía realmente competitiva.
Algunos datos económicos sobre Irán:
La República Islámica de Irán es el segundo país más grande de Oriente Medio, tras Arabia Saudí, y el decimoctavo del mundo. En 2014, la balanza comercial de Irán alcanzaba los 92.226 millones de dólares de exportaciones, principalmente hidrocarburos, y los 66.034 millones de dólares de importaciones. En este sentido, los principales proveedores de Irán son China, los Emiratos Árabes Unidos, Corea del Sur, Turquía e India. España ocupa el 15º lugar, con una cuota del 0.35% y unos 185 millones de dólares de valor.
El mercado iraní es muy atractivo por varios motivos: fronterizo con siete países, puerta de paso entre Oriente y Occidente, una población de 80 millones de habitantes -la mayor parte muy jóvenes- y una gran importancia geoestratégica. Por otro lado, la nueva realidad geopolítica de Irán ha aumentado el interés de este país por los recambios de automóviles, ferrocarriles, energías renovables, industria hidrocarburos, turismo y alimentación.
El Banco Mundial calculó que en 2016 el PIB de Irán pasara de un 3% (con sanciones) hasta un 5,8% (sin sanciones), y para 2017 prevé que esta cifra se acelere hasta el 6,5%, una de las tasas más altas del mundo.
Presencia española en Irán:
En Irán operan aproximadamente 1.400 empresas españolas, de las cuales cerca de 450 exportan regularmente. En 2016 las exportaciones españolas se centraron en productos como aparatos mecánicos (32%), aparatos eléctricos (8%), manufacturas de fundición (6%), colorantes (6%), abonos (5%), papel (4%), productos farmacéuticos (4%)… Por su parte, los principales productos de importación fueron fundiciones de hierro y acero (32%), café y té (26%) y fruta (26%).
Dada su situación geográfica y sus excepcionales recursos en hidrocarburos, el transporte marítimo es una actividad estratégica para la nación. Los puertos más importantes del país son el de Bandar-e Asaluyeh y el de Bandar Abbas. Aunque la capacidad portuaria iraní es de 5 millones de TEUs, según el Banco Mundial, el tráfico de contenedores en 2012 ascendió a 3,18 millones.
Irán es un país por construir, y las empresas españolas tienen un importante papel por jugar. España está muy bien considerada en el país, ya que trabaja con la república islámica desde antes de las sanciones y el gobierno español ha sido de los menos beligerantes contra Irán mientras ha durado el embargo occidental.
La industria de la automoción y las energías renovables se perfilan como ámbitos en los que las empresas españolas pueden tener mucho que decir. El sector de la automoción está al alza en Irán por la creciente demanda de vehículos y necesita inversión internacional y nuevos proveedores de piezas y materiales. Respecto a las renovables, el gobierno iraní podría recurrir al know-how español para sustituir el consumo interno de energía fósil por renovables, y dedicar los hidrocarburos a la exportación.
Durante el año pasado, el sistema bancario de Irán se reconectó el SWIFT, restableciendo la posibilidad de transacciones financieras directas de sus bancos. Ésta era una de las medidas más esperadas por los empresarios internacionales para poder establecer los contactos comerciales con Irán.
En Ibercóndor ya hace años que operamos en Irán proporcionando servicios de logística a nuestros clientes. Una experiencia que nos permite ofrecer un servicio optimizado y eficiente con la logística y aduana iraní para que las posibles oportunidades de negocio en este país se traduzcan en éxitos para nuestros clientes.